Robert Zemeckis siempre ha estado ahí. Además de haber ganado el Óscar al mejor director por esa maravilla titulada 'Forrest Gump', el de Chicago ha firmado títulos tremendamente variopintos y de la talla de 'Contact', 'Tras el corazón verde', 'Lo que la verdad esconde', 'El vuelo (Flight)' o la trilogía de 'Regreso al futuro'. Casi nada.
Comedia, drama, intimismo y espectacularidad
No obstante, en el año 2000, celebrando la entrada del nuevo milenio, el cineasta, a quien podríamos calificar como uno de los grandes artesanos en activo del Hollywood actual, estrenó uno de los mejores títulos de su ya de por sí magnífica filmografía. Este no es otro que 'Náufrago', el eterno relato de supervivencia protagonizado por Tom Hanks.
Con 'Náufrago', Zemeckis volvió a hacer gala de su ya de por sí demostrada habilidad para narrar en imágenes y manejar tonos y cadencias, moldeando un entretenimiento en el que intimismo y espectacularidad reman en una misma dirección impulsados por una puesta en escena brillante, por la impoluta fotografía de Don Burgess, por la banda sonora de Alan Silvestri y, por supuesto, por su interpretación principal.
No tengo pruebas, pero tampoco dudas, de que su trabajo como Chuck Noland se encuentra entre los mejores de la prolífica carrera de un Tom Hanks cuyo tour de force fue injustamente ninguneado en los Óscar en detrimento de Russell Crowe, que se alzó con la preciada estatuilla por su solvente participación en 'Gladiator'.
'Náufrago', rodada con un presupuesto estimado en 90 millones de dólares. se estrenó en las navidades del 2000, y llegó a recaudar un total de 430 millones durante su periplo en taquilla, convirtiéndose en una de las películas del año. Ahora, más de dos décadas después, además de en plataformas como Netflix, Prime video o HBO Max, puedes disfrutarla en RTVE de forma gratuita hasta el 1 de octubre.
Si no has tenido la oportunidad de verla, no te la pierdas.